Estoy regresando a mi mundo, esta vez sin barreras ni máscaras.
Recorrí un camino doloroso, de rodillas y llorando.
Poco a poco vuelvo a sentirme a gusto.
Están esos seres maravillosos que llegan a mi vida con sus acordes y palabras, abrazos y miradas, esos que me hacen recordar cuanto se puede sonreír en la vida.
Me falta recorrido, pero ya puedo ser yo otra vez.
miércoles, 2 de noviembre de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario