Soy una extraña fascinada en el universo paralelo.
Mi corazón se abre como una planta carnívora.
No puedo detener los latidos y los impulsos,
no tengo opciones, no pertenezco a ese lugar.
No quiero destruir la armonía; siento el amor en sus miradas,
son seres livianos y hermosos, sensibles y poseen luz propia.
Viven enlazados por vasos sanguíneos, ellos y ellas.
Sus voces cantan sentimientos y sus movimientos son gráciles,
imprecisos, pero perfectos.
Tengo miedo, no soy como ellos.
sí, lo soy.
Las heridas aún sangraban, pero coagularon con esta nueva paz.
No, no sigas. No mires ni toques. No eres digna. Ellos tienen alas, tú
sólo te arrastras, porque nunca aprendiste a usar las que tienes.
Al menos que ellos te enseñen.
Mi ser se desvanece, se rebana en trozos como la luna sólida.
jueves, 10 de noviembre de 2011
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