Decidí bloquear esa vía.
Para cultivar tesoros necesitaba frialdad.
¿Cómo no desearles? ¿Cómo resistirme?
¿Cómo no querer devorarles el alma?
Y lo logré, o al menos eso creí hasta ahora.
No quiero ser un tesoro de mis tesoros.
Un tesoro limita a otro.
Debería dejarles?
martes, 10 de abril de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario